Nuestro recorrido por el Valle de Altar reinicia en el cruce fronterizo entre México y los Estados Unidos por Sásabe, Sonora y Sásabe, Arizona. Como ya mencionamos, el corredor del Valle de Altar fue el principal camino de entrada para los inmigrantes indocumentados rumbo a Estados Unidos durante los 2000 y los primeros años de los 2010. El Valle de Altar lleva su nombre por el poblado y el río del mismo nombre en Sonora. Al lado norte de la línea internacional, el Valle de Altar no cuenta con grandes poblados – en Arizona el valle corre desde la frontera hasta los suburbios occidentales de Tucson. La trayectoria del Valle de Altar en Arizona es principalmente de norte a sur y cubre un área relativamente angosto rodeado por cerros en sus lados oeste (montañas Baboquívari) y este (las montañas Sierrita, Cerro Colorado, Las Guijas y San Luis). El tráfico de personas y contrabando narcótico estremece a la población estadounidense de esta zona. La elección de Donald Trump a la presidencia de los EEUU en 2016 tomo a cabo con una visión nacionalista para el país norteamericano, incluso una polémica propuesta de construir un muro a lo largo de toda la frontera México-Estados Unidos. Los primeros pasos en la construcción de esa obra diseñada para detener la migración informal y el narcotráfico se tomaron en el 2017, pero en el Valle de Altar – como en la gran mayoría de la línea internacional – ya existe un muro fronterizo. La valla fronteriza que se divisa aquí en las lomas al oeste de Sásabe, Arizona, fue construida en 2007 por la empresa Sundt Construction de Phoenix, Arizona. La instalación del cerco visto en esta imagen causo mucha polémica no tan solo por las cuestiones sociales que implicaba la valla sino también por la gran huella ambiental que dejaría el proyecto de seguridad fronteriza sobre la vida silvestre. [1] La aduana de Sásabe, Arizona, un poco después de su construcción en 1937. El edificio de ladrillo estilo colonial fue construido durante el programa de rescate económico del Presidente Franklin Roosevelt conocido en inglés como el “New Deal” o “nuevo trato” (FUENTE: Living New Deal, https://livingnewdeal.org/projects/inspection-station-former-sasabe-az/) En el lado estadounidense, Sasabe, Arizona, es un pueblo fronterizo casi fantasma. El pequeño Puerto Fronterizo de Sásabe es la garita menos transitada de Arizona. Según la Comisión Arizona-México, un organismo sin fines de lucro en los Estados Unidos dedicado al desarrollo económico de la frontera arizonense con México, el puerto estadounidense de Sásabe solo registra el cruce de 165 carros, trocas y peatones por día, con un monto total de 33,980 entradas vehiculares y peatonales en el año 2011. A comparación, los 3 puertos fronterizos de Nogales (el cruce fronterizo principal de Arizona) registraron 9.5 millones de entradas en 2011; en un día típico no es inusual que la Garita Mariposa de Nogales registre alrededor de 600 camiones de carga rumbo al norte antes de las 4 de la tarde. En cambio en Sásabe el flujo de tráfico automovilístico es tan ligero que uno debe oprimir un botón al entrar al lado estadounidense para que oficiales de la aduana de EEUU salgan a inspeccionarlo. El edificio de ladrillo estilo colonial de la aduana norteamericana en Sásabe remonta a 1937 y está inscrito en el Registro Nacional de Lugares Históricos. [2] Puerto Fronterizo de Sásabe, Arizona por Johnny Milano. En 1992-1993 el gobierno federal estadounidense modernizo el puerto, agregándole infraestructura para revisión de camiones y una nueva caseta de inspección. Los oficiales de esta aduana típicamente permanecen en sus puestos por varios años y llegan a ser bien conocidos en este pobladito binacional. (FUENTE: Daily Mail, http://www.dailymail.co.uk/news/article-3258980/What-guarding-border-really-looks-like-Pictures-veterans-retired-private-security-experts-patrol-Mexico-border-stopping-immigrants-smugglers-human-traffickers.html) Como el Sásabe de Sonora, el nombre del Sásabe arizonense proviene de la idioma del pueblo o’odham quienes llamaron el lugar “valle cabeza” (Ṣaṣawk). Hoy en día los o’odham viven al noroeste de Sásabe en la Reservación Tohono O’odham pero muchos de ellos cruzan este puerto para comunicarse con sus familias en el lado mexicano. Los habitantes indígenas del Valle de Altar se encontraron con misioneros católicos al servicio de la corona española a partir de los fines del siglo XVII cuando llegaron los misioneros de la orden jesuita. Según los propietarios del histórico Rancho de la Osa ubicado unas millas al oeste de Sásabe, la construcción europea más antigua del estado de Arizona está en el rancho y data desde 1725. Los misioneros jesuitas construyeron un almacén de adobe para guardar bienes en tránsito entre las misiones del Río Altar (como la misión de Oquitoa) y del Río Santa Cruz (como la famosa misión de San Xavier cercas de Tucson). Esa edificación de adobe fue abandonada durante gran parte del Siglo XIX cuando los sacerdotes españoles de las misiones en lo que hoy es Sonora y Arizona fueron expulsados por el gobierno mexicano. Hoy en día el histórico almacén con raíces coloniales de casi trescientos años funge como una cantina privada para los huéspedes del Rancho de la Osa, un rancho histórico establecido en 1889 por William Sturges. [3] El norte del Valle de Altar llego a ser parte de los Estados Unidos después de la Venta de la Mesilla (Gadsden Purchase) de 1853 cuando el gobierno de Antonio López de Santa Anna, bajo intensa presión norteamericana, vendió lo que hoy es el sur de Arizona a los EEUU, dividiendo el valle en dos. Investigaciones arqueológicas indican que grupos de o’odham semi-sedentarios habitaron varios puntos del Valle de Altar norteamericano por diferentes periodos durante los siglos XVIII y XIX. Lo que hoy conocemos del poblado de Sásabe tiene sus raíces en 1912 cuando Carlos Escalante y Fernando Serrano huyeron con sus familias de la violencia revolucionaria que sacudía al estado de Sonora durante la Revolución mexicana de los 1910. Escalante siguió hacia al norte, pero Serrano y su familia decidieron quedarse y construyeron una vivienda de adobe en lo que en ese entonces eran terrenos baldíos. Fernando Serrano nombro el área en honor a su santo, San Fernando, edificando una pequeña capilla dedicada a ese santo en una lomita cercas de la línea internacional. La familia construyo más casas de adobe para los viajeros que transitaban el corredor entre Tucson y las minas de plata y oro en el lado sur del Valle de Altar en México, dándole un carácter más establecido a la localidad fronteriza. [4] Aunque un decreto federal en 1880 promulgo el establecimiento de una aduana mexicana en El Sásabe, el pequeño poblado sonorense creció paulatinamente y no fue hasta la década de los 1910 que se construyó un edificio permanente para la aduana, que previo a eso se albergaba en tiendas de campaña. El ingreso de la familia Serrano creció cuando rentaron sus casas a los funcionarios de la aduana estadounidense. Según los descendientes de los Serrano, el crecimiento de “San Fernando, Arizona” fomentó el desarrollo de El Sásabe, Sonora (a veces conocido históricamente como Mesquite) que entro en una época de cierta prosperidad en los años 1920 cuando la Prohibición del alcohol en los Estados Unidos impulso la existencia de tabernas y casas de juego en esta frontera mexicana que alcanzo casi 800 habitantes en ese tiempo. [5] Las familias Serrano y Escalante mantuvieron contacto después de inmigrar a los Estados Unidos – para 1917 Carlos Escalante y su familia decidieron reunirse con sus amigos en San Fernando. Poco a poco, los Serrano vendieron sus propiedades a Escalante, eventualmente haciéndolo en el dueño del poblado fronterizo y ganándose el apodo de “Rey de Sásabe.” La escasez de documentación accesible en torno a la historia de Sásabe hace difícil determinar la fecha en que el poblado asumió su nombre actual – varios mapas históricos identifican a la localidad como San Fernando, incluso un mapa de 1935 del Departamento de Carreteras de Arizona. Sin embargo, para 1941 el poblado ya llevaba el nombre de “Sásabe” según un estudio catastral realizado por el Servicio Geológico de los Estados Unidos. [6] Una investigación escolar de Lilia Urias (una joven de séptimo grado en la Escuela Primaria de San Fernando) publicada en la edición del 21 de febrero de 1941 del Tucson Daily Citizen nos provee información que puede ayudarnos determinar cuándo cambio el nombre de esta frontera. En su investigación la joven Lilia nos relata que en una entrevista la jefa de la oficina de correos (Winifred Hickcox) le informo que el poblado fronterizo cambió de nombre porque mucho del correo destinado allí se enviaba equivocadamente a la mucho más grande ciudad de San Fernando al norte de Los Ángeles, California. Sásabe posiblemente regreso a su histórico topónimo o’odham en el invierno de 1940-1941 cuando la oficina de correos se trasladó del Rancho de la Osa a sus instalaciones actuales en un edificio de adobe que en ese entonces era otra propiedad del Rey de Sásabe. [7] El corredor por donde hubiera cruzado el ferrocarril Puerto Lobos – Sásabe en el noroeste sonorense en el inicio del Siglo XX. Comunicando a Sásabe y el área minero a su sur con los puertos Lobos y Libertad en el Golfo de California pudo haber creado una historia muy distinta para esta zona. (FUENTE: Luigi Radelli y Efrén Pérez Segura, “The Gold Placer of El Boludo Northern Sonora, Mexico,” Boletin Depto. De Geología, UNI-SON, vol. 9, no. 1) La historia de los Ambos Sásabe y el entero Valle de Altar podría haber sido muy diferente si un proyecto ferrocarrilero promovido por el gobierno mexicano desde los años 1880 se hubiera llevado acabo. Debido a la presencia de varios depósitos minerales de plata y oro en el área general del Valle de Altar en Sonora, el gobierno mexicano e inversionistas estadounidenses pretendían construir una vía de ferrocarril entre Puerto Lobos en el Golfo de California y Sásabe, Arizona, para mejor explotar las minas circundantes. La primera concesión para el proyecto fue promulgada en 1882, pero repetidos problemas con el financiamiento de la obra detuvieron su realización. Para 1910 el Development Company of America, con su sede en Sasco, Arizona (hoy en día un pueblo fantasma totalmente desolado) recibió una concesión del gobierno mexicano para construir un ferrocarril entre Puerto Libertad y Puerto Lobos, Caborca y la frontera con Sásabe. La empresa minera estadounidense pretendió conectar esa línea con nuevas vías que irían hacia Sasco en el área central de Arizona. Graves problemas económicos dentro del Development Company of America y sobre todo el estallamiento de la Revolución mexicana en noviembre de 1910 impidieron definitivamente que el Valle de Altar fuera integrado a las redes ferroviarias de los países vecinos. [8] A lo largo de la frontera entre los Estados Unidos y México, las numerosas ciudades fronterizas de la línea se conocen por su bullicio. Cuando uno piensa en cruces fronterizos como los de San Diego-Tijuana, El Paso-Juárez o los Ambos Nogales uno usualmente piensa en los altos niveles de tráfico automovilístico, tiendas y vendimias en todos los lados y en general el flujo de personas. Los Ambos Sásabes no comparten las características de las principales ciudades fronterizas – aunque el poblado rural del Sásabe mexicano sí cuenta con unos cientos habitantes, el Sásabe norteamericano es un pueblo casi fantasma. Es difícil determinar el número exacto de los habitantes de Sásabe, Arizona, ya que el poblado no cuenta con un gobierno incorporado y es simplemente una localidad dentro del condado Pima, un condado de gran extensión geográfica en el sur de Arizona. Según el censo estadounidense de 2010 solo 54 personas habitaban el extensivo código postal (85633) en que se ubica Sásabe. Sin embargo, en un artículo del Arizona Republic de Phoenix el periodista Daniel González afirmó que Sásabe solo tenía 11 habitantes en el 2011. [9] En las ciudades fronterizas entre México y los Estados Unidos, es común ver paradas de autobuses o vans (camionetas) económicas enlazando los cruces fronterizos con ciudades más grandes en el interior de sus países respectivos. Viajeros intentando salir desde Nogales hacia Tucson, para dar un ejemplo, puedan contar con varias salidas de vans cada hora, pero aquí en Sásabe, Arizona, uno debe tener más paciencia (y acceso a un teléfono celular) para poder transitar hacia Tucson o Phoenix. La espera por una van del San Judas Shuttle (una empresa registrada en Tucson) se hace en un ambiente áspero afuera de un edificio abandonado. Una caminata por la única calle pavimentada de Sásabe muestra lo que queda de los tiempos pasados de esta frontera. Varias casas de adobe atestiguan al legado de la comunidad ranchera que antes existía en Sásabe. Es muy probable que la mayoría de los edificios del pequeño poblado arizonense cuentan con ladrillos hechos en la ladrillera de El Sásabe, Sonora. Antes del descenso demográfico que afecto al Valle de Altar y Sásabe con la reducción de actividades ganaderas en la zona, muchos de los vaqueros de los ranchos cercanos – como los ranchos Aros, de la Osa, Buenos Aires y Santa Margarita – vivían en estas casas de adobe edificadas por los Serranos y Escalantes. La Ruta Estatal 43 de Sonora fue una de las carreteras importantes que recorrimos en nuestro recorrido por el Valle de Altar en México, particularmente yendo norte desde Altar, Sonora. En el lado norteamericano del valle, la Ruta Estatal 286 de Arizona comunica el pobladito de Sásabe con la metrópolis de Tucson por medio de un recorrido desértico y desolado. La Ruta Estatal 286 figura notoriamente en el contrabando de personas y narcóticos y es altamente vigilada por la Patrulla Fronteriza de los Estados Unidos. A unos pasitos de la Ruta Estatal 286, tanto los vecinos sasabenses como viajeros pueden encontrar uno de los pocos comercios formales del poblado – el Sasabe Store. La única tienda de Sásabe provee algunos servicios básicos – como comida y combustible – para quienes habiten o visiten esta localidad remota. Alice Knagge y Deborah Grider (madre e hija) son las dueñas y empleadas de la tienda que ha pertenecido a su familia desde 1932. Deborah Grider, una descendiente de Carlos Escalante, el “Rey de Sásabe”, recuerda su niñez en el Sásabe de antes en los 1960 cuando había familias que vivían en el poblado fronterizo. En esos tiempos todos los edificios de Sásabe eran propiedad de su abuelo Carlos Escalante. Cuando no estaba con su familia ayudándoles con su tienda y otros negocios, la pequeña Deborah cruzaba al lado mexicano para comprar dulces y regresaba a EEUU fácilmente sin ser inspeccionada por los agentes de la aduana norteamericana que ya la conocían bien. Con respecto a la tienda hoy en día, Anna Chan – una viajera por Sásabe que dejo una reseña sobre la tienda en Google – escribe que la tienda “tiene muchas cosas necesarias y bonitas para tener – y también es buena para aquellos que se encuentren varados y excelente para los vecinos locales que no pueden hacer el viaje de compras a Tucson.” [10] Aunque Sásabe casi es un pueblo fantasma, no lo es en su totalidad y las pocas docenas de personas que viven en el área tienen la opción de acudir al “Hilltop Bar” del centro del poblado entre las noches de los fines de semana. El periodista Daniel González describió el sitio como “el más extraño, sino más pequeño, bar en Arizona con solo 12 sillas y una mesita lo suficiente grande para un juego de baraja.” Ubicado atrás de la única tienda del poblado, el Hilltop Bar también es manejado por Knagge y Grider, quienes han decorado el bar con un ecléctico estético con temas de vaquero y artes indígenas y mexicanos. Según usuarios de Google, Deborah Grider no permite que clientes embriagados sin conductores designados salgan del bar y los obliga quedarse en uno de los dormitorios del complejo por $25 la noche. Por su parte, personas con necesidad de enviar correo también pueden visitar la oficina de correos en su histórico edificio de adobe lunes a viernes entre las 8:30am-10:30am y 11:00am-3:00pm. Como ya sabemos gracias a la investigación realizada en 1941 por la joven Lilia Urias, la oficina de correos se trasladó a este adobe de la familia Escalante en el invierno de 1940-1941. [11] Todas las casas de Sásabe, Arizona, permanecieron en las manos de Carlos Escalante, el “Rey de Sásabe,” por varias décadas hasta que en 1959 pretendió venderlas todas. Según varias fuentes periodísticas, Sásabe ha sido uno de los pocos poblados en todo los Estados Unidos que son la propiedad privada de una sola familia. La venta de Sásabe llamo tanta atención que en marzo de 1960 la importante revista LIFE envió a un foto-periodista a documentar la vida cotidiana del poblado en venta. En 1977 los herederos del famoso Rey de Sásabe vendieron todas las propiedades de esa frontera a una empresa de bienes raíces mexicana, los Hermanos Pesquiera, S.A., de Altar y Heroica Caborca, Sonora, México. Hoy en día el pueblo fronterizo norteamericano de 11 habitantes aún está en la posesión de la familia Pesqueira. [12] Esta frontera rural cuenta con su propia escuela de kínder hasta octavo grado – la Escuela Primaria de San Fernando. Con solo 27 estudiantes en el año escolar 2013-2014, el Distrito Escolar de San Fernando #35 es uno de los distritos escolares más pequeños de todo el estado de Arizona. En ese mismo año los grados con más estudiantes solo contaban con 4 jóvenes; según el sitio web del distrito, la Escuela Primaria de San Fernando cuenta con dos maestras, una de kínder al cuarto grado y otra del cuarto al octavo grado que también se especializa en educación especial. Contando las dos maestras, el número total del personal en el pequeño distrito es 8. Los jóvenes que terminan el octavo grado en San Fernando no tienen la opción de quedarse en el área de Sásabe para ir a la preparatoria y son obligados a ir a preparatorias en Sahuarita (a 65 millas/104km o 80 minutos de viaje) o Tucson (a 66 millas/106km con 72 minutos de viaje) para continuar sus estudios. Deborah Grider, la propietaria actual de la Sásabe Store, viajaba diariamente a Sahuarita High School en un viaje que en los años 1960 y 1970 tomaba casi dos horas. Los adolescentes de Sásabe y el sur del Valle de Altar en Arizona pasan a esperar su camión a Sahuarita en frente del Sásabe Store. [13] Saliendo de Sásabe hacia al norte uno puede divisar una pequeña capilla católica, la Iglesia San Fernando. El templo pintoresco lamentablemente se encuentra cerrado la mayoría del tiempo. Periódicos de los años 1950 y 1960 indican que los Ambos Sásabes, tanto del lado estadounidense como del lado mexicano, siempre han batallado por tener sacerdotes en sus iglesias remotas. A unas millas hacia el oeste de aquí se encuentra el histórico Rancho de la Osa que es conocido en la región por ser el lugar de hospedaje de varios visitantes como cazadores temporales, artistas (como el actor John Wayne) y hasta dos presidentes estadounidenses (Franklin Roosevelt y Lyndon Johnson). Un grupo de inversionistas compro el rancho en la subasta de 2016, reabriéndolo para visitantes interesados en el escenario del desierto sonorense. Muchísimo antes de ser convertido en un rancho turístico, el Rancho de la Osa era una gran operación ganadera tan inmensa que ganado perdido a veces se encontraba en las afueras de la ciudad de Phoenix en los tiempos lejanos antes de que el desierto sonorense fuera perforado por carreteras y fraccionamientos suburbanos. [14] A unas millas hacia el oeste de aquí se encuentra el histórico Rancho de la Osa que es conocido en la región por ser el lugar de hospedaje de varios visitantes como cazadores temporales, artistas (como el actor John Wayne) y hasta dos presidentes estadounidenses (Franklin Roosevelt y Lyndon Johnson). Un grupo de inversionistas compro el rancho en la subasta de 2016, reabriéndolo para visitantes interesados en el escenario del desierto sonorense. Muchísimo antes de ser convertido en un rancho turístico, el Rancho de la Osa era una gran operación ganadera tan inmensa que ganado perdido a veces se encontraba en las afueras de la ciudad de Phoenix en los tiempos lejanos antes de que el desierto sonorense fuera perforado por carreteras y fraccionamientos suburbanos. [14] Pedro Aguirre, descendiente de soldados españoles en Chihuahua, inmigro a Las Cruces, Nuevo México, en los años 1850 con su familia en donde formaron un rancho y un negocio de carga que servía una extensa zona entre Altar, Sonora e Independence, Missouri. En 1864 su hijo Pedro Aguirre Jr. estableció el Rancho Buenos Aires, usando su nuevo rancho como una base para el negocio de carga de la familia para la ruta Altar-Tucson y dedicándose también a la ganadería. En 1909 Magdalena Aguirre, la viuda de Pedro Jr. quien había muerto dos años antes, vendió el rancho a sus vecinos del Rancho de la Osa. [15] A lo largo de los años inversionistas anglo-sajones desarrollaron la capacidad económica de los dos ranchos y para el fin de la década de los 1950s el Rancho Buenos Aires tuvo la reputación de ser uno de los ranchos más connotados en el sur de Arizona. En 1959 el Rancho Buenos Aires, con su histórica casa de adobe y el Lago Aguirre, se vendió y durante los próximos 25 años cambiaría de manos varias veces más. Para 1984 el extensivo rancho llego ser propiedad de Pablo Brener, un gran industrialista mexicano de ascendencia lituana judía, con numerosas inversiones en Estados Unidos, incluyendo por un tiempo cadenas de hoteles y supermercados en California, dirigidas desde las oficinas del Macro Distribution Company de los Brener en el lujoso complejo de oficinas de Century City en Los Ángeles. Ya que las operaciones cotidianas del rancho se llevaban a cabo por los vaqueros que ya tenían años trabajando allí, el rancho simplemente fue otra inversión en el portfolio de Brener. [16] Sin embargo, para los mediados de los ochentas varios grupos ambientalistas en Arizona (como el National Audubon Society y el Nature Conservancy) pedían que se estableciera un refugio de vida silvestre para conservar el ecosistema del Valle de Altar, incluso una especie de codorniz en peligro de extinción, los codornices cotuí norteños. Muchos vecinos temían las consecuencias del fin de las operaciones ganaderas en Rancho Buenos Aires. El fin de la ganadería en el rancho podría afectar la economía del valle ya que otros ranchos cercanos – como el Rancho de la Osa – ya habían salido del mercado ganadero, reduciendo las oportunidades laborales del área y hasta posiblemente afectando la supervivencia de la Escuela Primaria de San Fernando ya que la mitad de sus alumnos eran hijos de los vaqueros que trabajaban en el Rancho Buenos Aires. “La especies que realmente está amenazada no es el ‘colinus rdgwayi’ mejor conocido como el codorniz cotuí norteña, sino los ‘homo sapiens’ que habitan y laboran en el área de Sásabe.” Pese la oposición de varios residentes del valle, el congresista por el sur de Arizona – Morris Udall – ayudo asignar fondos en el congreso estadounidense para que el USFWS comprara el rancho. Pablo Brener, siempre con su visión financiera, rechazo la oferta de compra por $5 millones del USFWS y no cedió en vender el histórico rancho hasta que el gobierno estadounidense le pago $8.9 millones el 20 de febrero 1985. Brener y sus hijos han mantenido un perfil bajo a lo largo de los años a pesar de que su Grupo Xabre compro la aerolínea “Mexicana de Aviación” durante su privatización en el gobierno del Presidente Carlos Salinas de Gortari. [17] Creciendo a través de los años con nuevas agregaciones, el Refugio de Buenos Aires hoy cuenta con una extensión de 117,107 acres o (473.92 km) y ha ayudado recuperar la población de la codorniz cotuí norteña entre otras especies. Aparte de la amenaza de nuevos descubrimientos minerales, el tránsito de inmigrantes indocumentados y contrabandistas desde el lado mexicano de la línea internacional es una amenaza para el ecosistema que el refugio pretende conservar. La inmigración informal de personas en busca de nuevas oportunidades en los Estados Unidos es un tema sumamente complejo (sin mencionar lo peligroso que es para quienes arriesgan su vida atenerlo al cruzar el desierto de Sonora) pero también es necesario reconocer tanto las causas económicas y políticas que impulsan esta migración y también el impacto humano de esta migración en el medio ambiente. [18] Una tormenta en una tarde de julio provee un poco de alivio de las altas temperaturas de verano en los desiertos del sur de Arizona. Esta arcoíris hace contacto con el horizonte en la orilla oriental del Refugio de Buenos Aires que en sí es la orilla del Valle de Altar. La altura de Sásabe en el lado arizonense del Valle de Altar mide 3,500 pies o 1,067 metros sobre el nivel del mar. El valle pierde su altura al viajar de sur a norte. En Robles Junction (o Three Points), en donde terminan el valle y la Carretera Estatal 286, la altura de la zona mide 2,540 pies o 774 metros sobre el nivel del mar. Nuestro recorrido por el binacional Valle de Altar termina cercas de donde empezó en la primera parte de esta serie: Baboquívari. La montaña Baboquívari deja su huella distintiva en el escenario desértico del Valle de Altar en Arizona. El cerro sagrado de los Tohono O’odham y un punto de referencia para muchos inmigrantes indocumentados entre otros, el Baboquívari atestigua el carácter rural, remoto y en muchas ocasiones áspero de este importante corredor. Las odiseas de las familias Serrano, Escalante y Aguirre – entre otras – son solo un ejemplo de la importancia de la huella mexicana en la formación del Valle de Altar en Arizona. Aunque esta historia binacional y transcultural no se sabe muy bien tanto en Arizona como en México, el legado o’odham y mexicano del Valle de Altar da testimonio al aporte hispano en la formación del estado de Arizona y de la profundas raíces transfronterizas de esta región en dividida por limites nacionales. NOTAS:[1] Brady McCombs, “Border fence construction near Sasabe to start Monday,” Arizona Daily Star, August 23, 2007 (http://tucson.com/news/local/border/border-fence-construction-near-sasabe-to-start-monday/article_586533a8-b45d-54e7-b38a-c652b69415e0.html).
[2] “Sasabe, Arizona,” Arizona-Mexico Commission, http://www.azmc.org/border-communities/sasabe-arizona/ (accessed Dec. 12, 2017); Jonathan Clark, “CBP stats show big drop in local border-crossings,” Nogales International, December 20, 2011, http://www.nogalesinternational.com/news/cbp-stats-show-big-drop-in-local-border-crossings/article_28530fac-2aac-11e1-8f2e-0019bb2963f4.html (accessed Dec. 12, 2017); Arnie Maltz, et al, “Forecast and Planning Capacity for Nogales’s Ports of Entry,” ASU International Logistics and Productivity Improvement Lab, http://ilpil.asu.edu/research/supplychainlogistics-projects/forecast-and-capacity-planning-for-nogales%e2%80%99-ports-of-entry/, pg. 18; “U.S. Inspection Station-Sasabe, Arizona,” National Register of Historic Places Program (https://www.nps.gov/nr/feature/places/14000243.htm) [3] Russell True, Dude Ranching in Arizona (Charleston, South Carolina: Arcadia 2016), 86-91. [4] Don Vance, “Try Sasabe for a Quiet Snooze,” Tucson Daily Citizen, February 5, 1953. [5] Alberto Suarez Barnett, “¿Cuando fue fundado Nogales?” Anecdotas Historicas Sonorenses, February 19, 2017 (http://anecdotassonorenses.blogspot.com/2017/02/cuando-fue-fundado-nogales.html); Don Vance, “Try Sasabe for a Quiet Snooze,” Tucson Daily Citizen, February 5, 1953 [6] Don Vance, “Try Sasabe for a Quiet Snooze,” Tucson Daily Citizen, February 5, 1953; “State Highway Department Road Map of Arizona, 1935,” Arizona State Highway Department, 1935 (https://www.azdot.gov/docs/default-source/scenic-routes/az_st_hwy_dept_road_map_1935combo.pdf?sfvrsn=2); “Presumido Peak Quadrangle,” U.S. Geological Survey, 1943 (http://www.lib.utexas.edu/maps/topo/arizona/pclmaps-topo-az-presumido_peak-1941.jpg). [7] Lilia Urias, “Sasabe Postmistress,” Tucson Daily Citizen, February 21, 1941, pg. 9. [8] “Imperial Copper Company,” The Copper Handbook: A Manual of the Copper Industry of the World, (1911) 971 (https://books.google.com/books?id=M8pIAAAAMAAJ&pg=PA971&dq=puerto+lobos+sasco+railroad&hl=en&sa=X&ved=0ahUKEwi9963wxoHYAhXK44MKHapIDTwQ6AEIMTAC#v=onepage&q=puerto%20lobos%20sasco%20railroad&f=false); Charles Zaremba, “Sonora: Railroads,”The Merchants and Tourists’ Guide to Mexico, Chicago: Althrop Publishing House (1883), 113 (https://books.google.com/books?id=9AIOAAAAIAAJ&pg=RA4-PA113&lpg=RA4-PA113&dq=puerto+lobos+sasabe+railroad&source=bl&ots=vENJOGK45B&sig=Cq3U-5Mpnn2CCfEQxQKAf523cT4&hl=en&sa=X&ved=0ahUKEwi_lve1xIHYAhUd3YMKHfoKBQsQ6AEIQDAK#v=onepage&q=puerto%20lobos%20sasabe%20railroad&f=false); “Concesion para construir un ferrocarril en el estado de Sonora,” Boletín de la Oficina Internacional de las Repúblicas Americanas, Issue 30, P. 463 (https://books.google.com/books?id=dMg-AQAAMAAJ&pg=PA463&lpg=PA463&dq=ferrocarril+sasabe&source=bl&ots=HYF3yJvTDC&sig=Lz5EdNsvtDrhFDzy8DfeV2MMg3c&hl=en&sa=X&ved=0ahUKEwit5dbUkoHYAhVC0GMKHZyRCqYQ6AEIZTAN#v=onepage&q=ferrocarril%20sasabe&f=false) [9] “85633,” United States Zip Codes, https://www.unitedstateszipcodes.org/85633/, (accessed December 10, 2017); “85633,” American Fact Finder, U.S. Census Bureau, https://factfinder.census.gov/faces/nav/jsf/pages/community_facts.xhtml#; Daniel González, “Arizona border outpost one of the quietest in U.S.,” Arizona Republic, November 27, 2011 (http://archive.azcentral.com/news/articles/2011/11/15/20111115arizona-border-outpost-sasabe.html) [10] Daniel González, “Tiny Arizona border town full of strange stories,” Arizona Republic, Nov. 13, 2011 http://archive.azcentral.com/arizonarepublic/news/articles/20111112arizona-border-town-sasabe.html (accessed Dec. 10, 2017); Anna Chan, Sasabe Store Adobe & Wholesale Mesquite Firewood Review, Google, https://www.google.com/search?q=sasabe+store&ie=utf-8&oe=utf-8&client=firefox-b-1#lrd=0x86d46b940dc20b6f:0xc0d087ba85dfdd8e,1. [11] Daniel González, “Tiny Arizona border town full of strange stories,” Arizona Republic, Nov. 13, 2011 http://archive.azcentral.com/arizonarepublic/news/articles/20111112arizona-border-town-sasabe.html (accessed Dec. 10, 2017). Anna Chan, Sasabe Store Adobe & Wholesale Mesquite Firewood Review, Google, https://www.google.com/search?q=sasabe+store&ie=utf-8&oe=utf-8&client=firefox-b-1#lrd=0x86d46b940dc20b6f:0xc0d087ba85dfdd8e,1; Lilia Urias, “Sasabe Postmistress,” Tucson Daily Citizen, February 21, 1941, pg. 9. [12] Leslie Ernenwein, “Sasabe’s Owner Studies Sale of Border Town,” Tucson Daily Citizen, November 18, 1959, pg. 1; Jeff Smith, “The Sale of Sasabe is a Borderline Affair,” Tucson Daily Citizen, March 4, 1977, pg 1. [13] “San Fernando Elementary School, Sasabe, AZ 85633,” AZ HomeTownLocator, https://arizona.hometownlocator.com/schools/profiles,n,san%20fernando%20elementary%20school,z,85633,t,pb,i,1003027.cfm; “Meet our Staff,” San Fernando Elementary School District #35, http://www.sanfernando35.org/index.cfm?pID=13905, (accessed December 10, 2017). Daniel González, “Tiny Arizona border town full of strange stories,” Arizona Republic, Nov. 13, 2011 http://archive.azcentral.com/arizonarepublic/news/articles/20111112arizona-border-town-sasabe.html (accessed Dec. 10, 2017). [14] Fernando Serrano, “An Old Ranger,” Tucson Daily Citizen, February 21, 1941, pg. 9. [15] Betty Leavengood, “In the Land of Good Winds: An Informal History of Buenos Aires Ranch,” Journal of Arizona History, Vol. 47, no. 1 (Spring 2006), 2-12. [16] Betty Leavengood, “In the Land of Good Winds: An Informal History of Buenos Aires Ranch,” Journal of Arizona History, Vol. 47, no. 1 (spring 2006): 22-28; Jesus Sanchez and Martha Groves, “Boys Markets Gets $130.7-Million Bid for 54-Store Chain,” Los Angeles Times, March 2, 1988 (http://articles.latimes.com/1988-03-02/business/fi-321_1_supermarket-chain); Ralph King Jr., “Mexican contrarian: Pablo Brener quadrupled his family's fortunes during 1980's,” Forbes Magazine, Sept. 4, 1989; “Friends and Family, Mexican Style,” Wired, Oct. 1, 1995 (https://www.wired.com/1995/10/mexico/). [17] Betty Leavengood, “In the Land of Good Winds: An Informal History of Buenos Aires Ranch,” Journal of Arizona History, Vol. 47, no. 1 (spring 2006): 22-28; Jaime Santiago, “Pablo e Israel Brener Brener,” Expansion, 20 de septiembre de 2011 (http://expansion.mx/expansion/2011/09/14/pablo-e-israel-brener-brener); Elvira Concheiro, El gran acuerdo: gobierno y empresarios en la modernización salinista (Mexico, DF: UNAM, Instituto de Investigaciones Economicas, 1996), 85-88. [18] Leigh Ferrara, “Shifting Migration: Can a fence along the border clear up 25 million tons of trash and massive erosion in the Sonoran Desert? History says No,” Mother Jones, Sept. 29, 2006, http://www.motherjones.com/politics/2006/09/shifting-migration/#
2 Comments
Aaron rivera montijo
7/8/2024 17:28:10
Mi padre nació en sabe son, su nombre Roberto Rivera Maldonado, hijo de Reynaldo Q Rivera Quiroz ,celador de montada y jefe de aduana y de Carmen Maldonado Peralta nacida en Caborca son. El nacimiento de mi padre fue en 1925, y todos sus hermanos nacidos en sabe,mi pregunta es si tiene fuente bibliográfica del personal de aduanas del periodo 1920.a 1930 ,y si existe información de el rancho conocido como las nopaleras , muchas gracias y a sus órdenes ennpuertonpeñasco
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Carlos Parra
Historiador de MX, EEUU, y de historia mexico-americana, latino-estadounidense y fronteriza Archivados
May 2019
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